Un plaguicida prohibido sigue aplicándose rutinariamente en España debido al mal uso de las autorizaciones excepcionales del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La empresa responsable fue Ercros, una compañía que compró Electroquímica Onubense.El exministro de Industria Josep Piqué fue presidente de la empresa investigada. El Seprona ha destapado que estas fábricas trucaron el software para ocultar las emisiones.
Últimas mediciones realizadas en las balsas de fosfoyesos han determinado que los niveles de radiación superan por seis, y niveles de mercurio descontrolados.